¡Comandantes!
Con el KV-122 de nuevo en rebajas esta semana, hemos pensado que no hay mejor momento que este para sumergirnos en la historia de tan icónico vehículo. Aquí os dejamos, pues, la historia del KV-1S y de los numerosos e increíbles carros a los que dio origen. Así que, sin más, ¡echemos un poco la vista atrás!
Hace mucho, mucho tiempo existían solamente el KV-1S y el KV-3. Ambos eran imponentes carros de nivel VI, pero solo uno de ellos lograba acaparar la atención de todos. Y con razón... más o menos. En general, el KV-3 era una bestia de tomo y lomo, con un pedazo de cañón y un sólido blindaje, mientras que lo único destacable del KV-1S era su movilidad. Una gran ventaja en el campo de batalla, pero no lo suficientemente decisiva como para eclipsar a su hermano mayor.
¡Veamos cómo terminó todo!
De repente, algo ocurrió. Con una potencia inigualable entre sus compañeros de nivel, el KV-3 finalmente se vio entre iguales al pasar al nivel VII. Allí, el vehículo seguía siendo competitivo, así que el cambio afectó principalmente al KV-1S, que por fin terminó calando en la mente del público. Finalmente, el hermano pequeño obtuvo su venganza... ¡y qué venganza! Aún en el nivel VI, el KV-1S recibió el reconocimiento que se merecía gracias a su devastadora combinación de una gran tasa de daños con una alta velocidad. Por aquel entonces, casi cualquiera podía alcanzar un rendimiento aceptable a bordo de este vehículo y no muchos carros podían siquiera hacerle sombra a semejante bestia... y ninguno de ellos era pesado.
Pero como cualquier reinado, el del KV-1S floreció para luego decaer. La potencia de aquel vehículo se dividió para dar vida a dos increíbles contendientes de estilos muy distintos: el KV-85 y el nuevo KV-1S. El último se encuentra hoy en el nivel V, donde hace las veces de KV-1, y se centra en la movilidad más que en la supervivencia. En el nivel VI contamos ahora con el KV-85, muy similar al KV-1S durante su periodo de gloria, pero con cañones más equilibrados. Ya os gusten los pepinazos de un cañón de 122 mm o el DPM de uno de 100 mm, la fiabilidad de este carro está fuera de toda duda.
Y así llegamos al desenlace de esta historia: la incorporación del KV-122 al nivel VII, donde puede poner a prueba su impresionante movilidad y apabullante cañón de 122 mm, como colofón al legado del KV-1. ¿Os suena, verdad? La verdad es que el KV-122 es extrañamente similar al antiguo KV-1S, lo que lo convierte en toda una amenaza para los oponentes de nivel más bajo, así como en un duro adversario para todos los demás. ¡Confiad en él e incorporadlo a vuestro garaje!
¡A rodar!